Días de Rock ´N Roll

Silencio, solo silencio, el cierre de la cremallera abriéndose, mi púa roja rasgando un Fa# menor 7, interrumpo el silencio con suavidad.

Con la primavera no sé muy bien si es la sangre lo que altera, pero sí que me devuelve, poco a poco, lo que necesitaba. Y lo cierto es que me da igual ver la vida tras el humo de un pitillo, buscarla al fondo del caso, o reventar los cristales de mi al rededor para no ver más reflejos. Al fin y al cabo la sucesión de mis pasos me sigue llevando a situaciones cada vez más interesantes.

Dos días envuelto en la música que me hace vibrar, con todo tipo de sentimientos rondando entre alcohol, melodías, historias, abrazos, algún que otro beso, de andar kilómetros a pie cuando el reloj ya ha dado una vuelta completa.

Recordar a las 2 de la madrugada que es el Rock ´N Roll abrazado de más que un amigo, saltando y dejando en cada salto la voz coreando lo que fue un himno y siempre lo será.

Coger fuerzas de este comienzo de Abril y que me dé todo su calor, que me haga recordar lo que es ser feliz.

Termina la canción rasgando de nuevo ese acorde que tan melancólico suena mientras se apagan los recuerdos convirtiéndose en una tímida sonrisa...

You´re my wonderwall...