viernes, 29 de julio de 2011

Irrelevancias < Relevancias

No me cuesta deshacerme de ciertas situaciones y todo lo que conllevan. Si me deshago de ellas es por algo.
Me conformo y soy feliz con disfrutar de los pequeños placeres que depara el día a día, y otros que no son tan pequeños ni son deparados por que sí. Un trago, tirarme en el césped o cualquier sitio con ellos, poder hacer que las cuerdas de mi guitarra sigan vibrando como dicta el fruto de mis pensamientos y sentimientos, un café en alguna cafetería, un poco de Sol, un poco de noche, recibir algún mensaje recordándome que la recuerde antes de que recuerde que he de recordarla, risas al unísono que solo entenderemos nosotros, quemarnos los labios, crear teorías sobre el mundo actual que nunca fallarán, hacer el mundo de nosotros y de nosotros el mundo, hazañas épicas que no pueden quedar guardadas en ningún cajón, que los impulsos tomen el mando, ayudarnos y decir lo que el otro (y los demás) piensan, sentir que en mi vida solo va quedando lo que realmente merece la pena...


No me cuesta deshacerme de lo que no me duele, y no me duele lo que no me importa o deja de importarme, y acaba por no importarme lo que no me hace seguir cogiendo por la cintura a la vida cada mañana y sonreír mientras sé que vale la pena hacerlo.

domingo, 17 de julio de 2011

Miradas (V. 2.0)

Las miradas son las cómplices de nuestra alma, de todos nuestros actos y de nuestros pensamientos. Ellas no engañan, nadie las puede controlar tanto. Al fondo de nuestros ojos se ve quienes somos, que hemos sufrido y que no deseamos sufrir.


Tú me mirabas desde el primer momento, notaba la presión de tus ojos clavada en mí, y mi mirada (que aún no se muy bien que gesto tiene) se entrecruzaba con la tuya. Demasiado me cuesta sostener ciertas miradas que encima la quisiste acompañar de una sonrisa, a mí, difícil de sonreír tanto, me salía una media sonrisa, ya éramos cómplices de algo que, aunque no lo entendiera, no podía dejar de hacerme estar plácidamente bajo tu presión.


Todo se desarrollaba con aparente normalidad, pero a pesar de ciertas circunstancias seguías parando por al lado mía, creando un juego de a ver quien miraba primero y quien sonreía después. Tus ojos claros, como hace tiempo no veo ningunos, parecían tener un código indescifrable que enganchaba a mirarlos aún más.


Te evité, me ponía nervioso y soy así de cortado, "como el café con leche" dije cuando me iba a sentar y me lo decían. La Luna seguía reinando un poco más alta, pero totalmente llena, y de vez en cuando las nubes de su al rededor le daban más belleza.


Otra vez esa presión, miré alto, al frente, y tus ojos volvían a mirarme y tu boca muy seria, esta vez la miré a ella primero, y se me escapó la sonrisa a mí, ganaste, diste la sonrisa de vuelta y se cruzaron las primeras palabras pero indirectamente, como si para hablar con la boca sí necesitáramos intermediarios. Yo contestaba de forma irónica e indirectamente también, entonces las miradas cobraban más valor y las sonrisas algo más de fundamento, hasta llegar a convertirse en pequeñas risas.


Llegaban momentos en que la presión no cedía, y tus ojos parecían ser mi propia sombra, siguiéndome en cada movimiento, esperando cruzar mi mirada con la tuya y mover los labios como si nos dijéramos algo que nos hacía reír después.


Nuestros ojos mantenían conversaciones demasiado seguidas, y nuestra boca lo hacía cada vez con más intermediarios. Se acabó, no me gustan las personas por medio, te hablé, tú reías bastante, repetías mis ironías y después me contestabas. Se hizo un silencio entre los dos, incómodo quizá para quien estuviera observándonos.


Ya era mi hora de partir, soy así, inquieto a más no poder y siempre buscando otros sitios, porque tengo miedo a acomodarme aunque tus miradas me hicieran sentir a la vez que presionado, a gusto. Se despedían por mí, yo seguía casi sin abrir la boca, y de espaldas sentí la presión, te miré me sonreíste por última vez y pude leer un "hasta luego" en tus labios, como si fueran mudos para decir las cosas en alto. Yo lo dije, en general, alzando la cabeza pero con la vista clavada en la tuya.


Aún hay noches en que me presiona tu mirada, en las que siento esa comodidad que me daban tus ojos y la media sonrisa se me escapa como si estuviera viendo la tuya. Pero esa noche no supe quien eras, ni de donde eras, ni apenas un dato de ti, suficiente.


Miradas de Primavera

jueves, 14 de julio de 2011

Arte

No hay mucho que decir de esta entrada. Que me parece genial la gente que invierte su talento en hacer cosas geniales, como escribir textos, poemas, canciones, poemas que luego son canciones, vídeos y demás cosas que son auténticas bellezas para nuestros sentidos. De ahí mi adoración por la música y por ciertas personas que hacen que ese y demás artes sigan en lo más alto y mejor de lo que podría estar.

Muy bueno el vídeo de mi gran amiga, aunque no es la palabra que se le puede dar pero no sé cual sería exactamente, María, quien con unos dibujos, colores y efectos, al estilo Stop-motion (como si fuera tan fácil hacer eso, yo siempre quise) y una gran canción ha hecho una muy buena obra de arte, porque estas cosas, cuando se hacen bien, son arte.

Enhorabuena, me encanta como ya te dije y siempre soy sincero, sobre todo contigo. ¡Sigue así! Acabarás llegando donde te propones y más.

Mañana Nos Casamos en Las Vegas

lunes, 11 de julio de 2011

Autoposesivo

Demasiado tengo con que a veces mi vida no sea totalmente mía o que mi futuro (ese gran desconocido del que no me gusta hablar) se me escape a menudo como si alguien más lo controlara como para que encima tenga que formar parte de alguien.

Que no soy un solitario, pero tampoco creo que deba de completar o complementar a alguien, no es algo que me vaya a llevar a ningún sitio, ni creo que haya alguien que haya que merezca la pena lo suficiente como para que exponga mi libertad y esas cosas que conlleva.


Que mi vida es mía y yo soy de mi mismo, hay que darnos vida antes de que la vida nos sea arrebatada en cualquiera de sus sentidos...


"No me siento a gusto siendo la novia de nadie, no me siento a gusto siendo la nada de nadie, ¿entiendes? Yo prefiero estar sóla. Las parejas complican y al final se hieren los sentimientos. ¿Qué falta hace? Somos jóvenes y vivimos en una de las ciudades más bonitas del mundo, disfrutemos mientras podamos y dejemos las cosas serias para después"


Cuanta razón. Gracias por descubrirme la película y a esa pequeña doble de mí, por suerte o desgracia. Aunque mucha gente deteste cosas como esa yo me siento genial en ese camino, seré detestable...


No te jode... 

viernes, 1 de julio de 2011

Rehabilitación

Y las noches pasaban como calles vacías, como un marcador con empate a cero, como un aeropuerto sin aviones, como una guitarra sin cuerdas o como un cenicero vacío.

Encontradas tantas respuestas a las preguntas ahora surgen preguntas a las respuestas, intentando enlazarse, dejando más en claro que todas mis razones van una en dirección contraria a la otra, llegando a esquivarse, rozarse por milímetros e incluso algunas chocando, rompiéndose en mil pedazos haciendo más difícil aún poder circular.

Aún con todas esas cosas mi estado ahora mismo no se clasifica más que bohemio, más que nunca, buscando la belleza en las luces y sombras de la ciudad, buscando simplemente, mi mente como no, no para de trabajar...

Ahora con todo mucho más claro, sé con más certeza que antes, que ya es decir, donde puedo enfocarme, hacia donde. Los ánimos es lo que más abunda por aquí, con sus bajones, típicos, pero ya por otros casos, a los que les encuentro soluciones algo rápidas y acertadas.

Me viene acompañando todos estos días, y que cierta que es... No sé, no sé, no sé, y a este paso nunca sabré... ¿Persona, animal o cosa? No sé que acabaré siendo, ni de quien será la situación que lo acabe determinando, pero hazme caso, abre los oídos, cierra los ojos, déjate llevar por lo que dice, por el tono de voz, por los ánimos de la música, por todo... ¿Quizá al final no sea tan malo, no?